El director paceño Miguel Nina, reconocido por su aclamado cortometraje «Olivia», se encuentra en pleno rodaje de su ópera prima, «Huáscar», una película que fusiona el rock boliviano de la década de 1980 con la lucha contra la opresión militar. Con la producción de Diego Revollo y a cargo de Transbordador Audiovisual.
Mira la entrevista que tuvimos en nuestro programa «Todas las Voces» con el director y el productor:
La historia sigue a un joven músico de La Paz cuya relación amorosa se ve truncada por la dictadura. Este joven se ve obligado a exiliarse junto a su banda de rock, donde descubrirán el poder de un disco prohibido, «El Inca», una pieza fundamental del rock boliviano. La película narra cómo la música se convierte en una herramienta de resistencia, con el poder de desafiar la censura y liberar lo que la dictadura intentaba silenciar.
La grabación de «Huáscar» se está llevando a cabo en locaciones emblemáticas de La Paz y en los alrededores del majestuoso lago Titicaca, prometiendo un entorno visualmente impactante que complementa la emotiva trama.
Un director con una trayectoria premiada
Miguel Nina, nacido en La Paz en 1986, es un cineasta con formación en Antropología, lo que le ha permitido dotar a sus trabajos de una profunda sensibilidad social y cultural. Su cortometraje «Olivia» fue un éxito rotundo, obteniendo el premio al Mejor Cortometraje en el Festival Internacional de Oruro Diablo de Oro 2024, el Premio único del concurso municipal Amalia de Gallardo 2023, y el Cóndor de Plata en Cochabamba en 2023. Además, «Olivia» fue seleccionado para el prestigioso festival internacional de cortometrajes de Winterthur, Suiza.
Entre sus otros trabajos destacan la serie documental «Diálogos Naturales», ganadora del Premio Plurinacional Eduardo Abaroa 2021, y su participación como productor y director de fotografía en películas como «Llaki» de Diego Revollo y «Disco de Piedra» de Geraldine Ovando.
«Huáscar» es un proyecto que ha sido reconocido desde sus inicios, ganando el FOCUART 2021 en la categoría de proyectos audiovisuales en desarrollo, y siendo seleccionado en diversos laboratorios y encuentros de producción, como Visiones Andinas Minka de Producción en Perú. Con este sólido respaldo y un equipo de profesionales comprometidos, la película se perfila como una de las producciones más esperadas del cine boliviano, dispuesta a llevar un mensaje de resistencia, música y memoria a la gran pantalla.