LA PAZ / 18 de diciembre. Ayer, en La Paz, se volvieron a escuchar los sonidos chicheños fusionados con reggae, rock y folk de Las Ovejas Negras de Tupiza en un intenso concierto en el Café y Culturas “Las Comadres” junto al público paceño.
Ubicado en la calle Murillo, entre Sagarnaga y Cochabamba, hoy sábado 18 de diciembre habrá una segunda y última presentación en “Las Comadres”, con el cover a Bs 30, desde las 21.00, con Luis Orellana en la batería, Ramiro Alfaro en la guitarra eléctrica, Iván Alfaro en el bajo y el fretless y Aldrin Sivila como vocal y guitarra acústica.
“Van a tocar todos sus temas y algunos de los que se vienen para el nuevo disco que van a grabar conmigo en Santa Cruz”, dijo Nelson Vargas, productor musical y dueño del estudio “Gestar: Laboratorio Audiovisual”.
Con una música que junta raíces chicheñas del sur de Bolivia, mezclándola con sonidos modernos, Las Ovejas Negras de Tupiza son los creadores y representantes del innovador género conocido como rock reggae rural.
Compone Sivila, lo manda en una maqueta de guitarra de palo a Potosí donde Ramiro Alfaro crea la línea musical y hace arreglos, para mandárselo Iván Alfaro y Orellana, quienes preparan una base para el tema.
Conocidos por sus letras “bolivianizadas”, Las Ovejas Negras de Tupiza tienen también un mensaje político muy firme. Son antisistema, se pronuncian contra los status quo y proponen ideas para de una vez empezar a cambiar la mentalidad de la gente, como se puede escuchar en su tema Revolución Mental.
“Parece significar una revolución de la forma de entender la música chicheña, con sus letras vienen elaborando una nueva línea que influye, incluso, en la construcción del tejido social, ahí el nombre de su primer disco ‘Revolución Mental’”, reza la descripción del evento en redes sociales.
O Maldita Careta, donde denuncian a sacerdotes, abogados y políticos, siempre al borde de querer salir a golpearlos y acabar con esa corrupción, muy conscientes de que hacerlo significaría ser rechazados por la propia gente, “que es lo que le ha pasado, cuando una persona como Aldrin pide justicia, o se pronuncia por una causa es el loco, el zafado, el hippie”, opina el productor musical de “Gestar”.
“No tocan covers, pero van con un estilo de los clásicos psicodélicos como Pink Floyd o The Who”, añade Vargas. El productor musical está sorprendido del cómo la banda se las arregla para armar un show que se mantiene fuerte en su hora y media de duración, con pocos ensayos y con el hecho de que los integrantes de la banda están repartidos entre Cochabamba y Potosí.
El total de su actual discografía está disponible en Youtube y Spotify.
Facebook Comments